En tiempos de mis padres, se solía oír de vez en cuando la expresión “Dinero llama a Dinero”, a
lo largo de este año, hemos podido ver en el mundo de los escritores famosos la evolución de esta frase hacia una particular de este mundillo que podríamos denominar “Best-seller llama a best-seller”.
Como he comentado en varias ocasiones soy un enamorado de las novelas de acción (o de evasión) en
diferentes géneros. Dentro del mundo de las novelas de agencias de espionaje y contraespionaje, policiacas, thrillers o el nombre que prefiráis hay varios escritores que a lo largo de muchos años han sido algunos de mis favoritos:
· Robert Ludlum: para mí el mejor en temas espionaje. Libros entre 800 y 1.000 páginas que eres incapaz de soltar. Muy conocido por la saga de Bourne, aunque una vez más las películas (salvo el primero) no tienen nada que ver con los libros (a favor de estos por supuesto). Os los recomiendo todos (sobre todo los primeros). Mi favorito es “El cofre de Constantina”.
· Trevanian: escritor especializado en libros de asesinos profesionales contratados por agencias gubernamentales. Tiene varios muy buenos, aunque el mejor de ellos y libro de culto para los amantes
del género ha sido durante muchos años “Shibumi”.
· Ian Fleming: puede que haya muchos lectores de este escritor. Pero seguramente se puede multiplicar por 1.000 o 10.000 el número de personas que han visto las películas del protagonista de sus libros: James Bond.
A estas alturas os preguntareis que tiene que ver la enumeración de escritores de Best-Seller con
él título del post. Pues, que entre ellos tienen cinco cosas en común:
· Que los tres eran famosos y vendieron millones de libros. Eran los reyes de los Best-Seller junto con Frederick Forsyth, Tom Clancy y otros dos o tres más.
· Ligado con lo anterior sus fieles lectores (entre los que me encuentro) eran auténticos consumidores de libros.
· Que de sus libros han hecho películas para el cine.
· Que los tres están muertos.
· Que los herederos de sus “derechos de autor”, han querido hacer con ellos como nosotros en su día con el Cid Campeador, es decir que siguieran ganando batallas (vendiendo libros) después de muertos.
Lo difícil era el cómo conseguir esto último, y aquí entra lo de “Best-Seller llama a Best-seller”. Podían
haber intentado seguir la estela alguno de sus propios herederos, pero eso suponía tener el ingenio o contratar a un “negro literario” (o “escritor fantasma”).
Probablemente a un genio de la mercadotecnia (o algún familiar/heredero que le dio muchas vueltas
al tema), se le ocurrió el sumar fuerzas. Es decir llegar a un acuerdo con otro escritor famoso de “Best-sellers”, que continuase alguna de las sagas famosas de los fallecidos.
No sé si se les ha ocurrido a todos a la vez, se le ha ocurrido a uno el primero y los demás le han copiado, o utilizan la misma editorial o manager. El caso es que han llegado a acuerdos, con los que el los ganan y nosotros los lectores también. En mi caso los acuerdos que conozco también incluyen a escritores que de los que soy fiel seguidor. Os paso a contar como han quedado las “uniones”.
· Robert Ludlum ha quedado emparejado con Eric van Lustbader (especialista en libros de acción que transcurren en el lejano oriente). Os recomiendo que leáis la saga de Nicholas Linnear (es tocayo, que se le va a hacer). Esta unión ha sido particularmente prolífica y lucrativa. Ludlum escribió tres libros sobre Bourne. Eric va a uno por año y lleva siete. Entre ambos además cuatro películas llevadas al cine
· Trevanian emparejado con Don Winslow, escritor especializado en novela negra y libros sobre narcotraficantes. Probablemente el mejor que he leído sobre este último tema ha sido su libro “El poder del perro”. Muy duro pero deber ser fiel a la realidad. Os recomiendo “El invierno de Frankie Machine” (no podréis soltarlo). Esta semana han echado en la televisión la película sobre su libro “Salvajes”, también sobre narcotraficantes. Don Wislow se ha encargado de continuar la saga de Nicholai Hel en Shibumi (casualmente también tocayo). El libro es Satori y es buenísismo. Trevanian estaría orgulloso.
· Ian Fleming para terminar ha sido emparejado con Jeffery Deaver, autor entre otros libros de la saga de Lincoln Rhyme (El coleccionista de huesos, etc.). A mí personalmente me encanta “La estancia azul”, libro que aúna acción e ingeniería social. Es un libro que durante años he recomendado a mis alumnos del Master de Tecnologías Informáticas y a todos los que lo han leído les ha encantado. Como no podía ser de otra forma Jeffery, se ha encargado de continuar la saga de James Bond en Carta Blanca.
Espero que después de estas líneas estéis de acuerdo en llamar a este fenómeno literario “Best-Seller
llama a best-seller”. Yo por mi parte ha leído prácticamente todos los libros de los seis escritorios anteriores y procuraré seguir haciéndolo con los tres restantes. Se ha demostrado una vez más que “la unión hace la fuerza”.